1.1 AGOTAMIENTO DEL MODELO ECONÓMICO-POLÍTICO A FINALES DE LOS AÑOS SESENTA
Cuando se hable de niveles de desarrollo, siempre se cotejan datos o desenvolvimientos de distintos tipos, y cuando se compara a nuestro país en el ámbito político, encontramos que presenta rasgos excepcionales en relación con los demás países de América Latina.
Al finalizar los años sesenta las crisis políticas no se manifestaban todavía en el ámbito de la lucha electoral (como ocurrirá a fines de los años ochenta), sino en otros ámbitos, como los sindicales, campesinos o estudiantiles.
El año de 1968 encarnó una de las peores crisis sociales y políticas de nuestro país. Seguramente en quinto semestre tuviste la oportunidad de analizar esta situación que marcó, en forma definitiva, una nueva trayectoria histórica de nuestro país.
Posiblemente, la consecuencia principal de estos acontecimientos fue la pérdida de credibilidad de la sociedad civil hacia el sistema político, y en general hacia el Estado y sus mecanismos de control. Se desprendió de ello que la sociedad se tornara más exigente y participativa. Como resultado de esto, el grupo en el poder intentó reformas, las cuales serán analizadas en este capítulo en los ámbitos social, político y económico.
Otro problema que se presentó fue el agotamiento del modelo económico, principalmente el conocido como “desarrollo estabilizador”, que ya analizaste en Estructura Socioeconómica de México I. Como recordarás, se caracterizó por una constante evolución positiva en el conjunto de ramas y sectores de la economía, sobre todo en un crecimiento promedio del 6% anual del Producto Interno Bruto; una inflación moderada, inversiones ascendentes y empleo creciente. Entre 1960 y 1966 el ritmo de acumulación de capital fue el más alto de la historia de nuestro país.
Entre 1967 y 1970 se aprecian claros signos de agotamiento del modelo de acumulación: desaceleración del crecimiento del PIB y de las actividades agrícolas e industriales, una reducción del ritmo de inversión tanto publica como privada, creciente capacidad ociosa de la industria, presiones en el incremento de los precios (sobre todo en alimentos), entre otros.1
Lo que ocurre en nuestro país tiene su propia lógica y su propio proceso; pero también es importante el efecto del entorno internacional, en el que el patrón de acumulación de la segunda posguerra también se agotó. Estados Unidos ya no es la potencia hegemónica y tiene que protegerse de sus competidores, lo que a nivel mundial determina una baja en el ritmo de inversión y comercio que afecta a México, agudizando su crisis.
La guerra comercial desatada trajo consigo una época de proteccionismo, delineándose así una crisis a nivel mundial en la que México no podía quedar fuera.
El agotamiento simultaneo de los modelos de acumulación nacional e internacional, combinados con la crisis social y política internas, marcaron el fin de una etapa de equilibrio y estabilidad, dando inicio a otra muy turbulenta y problemática. A todo esto se sumaron los costos económicos y sociales derivados de la organización de dos eventos muy importantes: la Olimpiada en 1968 y el Mundial de Fútbol en 1970.
1. De las noticias del periódico publicadas dentro de un lapso de tres o cuatro días, analiza las que se refieren a la situación social y política de dos o tres países de América Latina y compáralas con las de nuestro país.
1
Cuellar, Ricardo: La crisis y la política del capital en México. Instituto de Investigaciones Económicas, UNAM, México, 1988.
2.Investiga las formas de organización política de dos países de América Latina y su situación social.