2.3 CAMBIOS DE LA MATERIA
Con anterioridad se expusieron diversas manifestaciones de la materia y de la energía, la forma en que están interrelacionadas, de tal manera que ahora es posible cuestionarnos ¿cómo puede la energía provocar cambios sobre la materia? Para explicar esto utilizaremos como ejemplos fenómenos que ocurren a tu alrededor.
Siempre que una sustancia cambia, alguna forma de energía interviene. Así, decimos que un cambio es una conversión de la materia, de una a otra forma distinta, debido a su interacción con la energía.
Reflexiona sobre las siguientes preguntas:
¿Qué sucede con la gasolina para que se pueda poner en marcha un automóvil?. ¿Por qué se oxidan los metales?. ¿Sucede algún cambio cuando se seca la pintura de alguna superficie?. ¿Por qué un chocolate se derrite en tus manos?. ¿A qué se debe el brillo del sol?. ¿Cómo enfría un refrigerador?. ¿Por qué la carne cambia de color cuando la cocinamos?. ¿A qué se debe que tu organismo se encuentre normalmente a 37ºC?. ¿Por qué el hielo funde en el agua?. ¿Por qué al hervir agua desprende vapor?. ¿Cómo se produce energía eléctrica en una pila?. ¿De dónde obtienen las plantas su energía?. ¿Por qué el aroma de un perfume se volatiliza rápidamente?.
Las preguntas anteriores corresponden a algunos ejemplos de cambios que observamos muy a menudo y que pocas veces analizamos; la lista puede parecer larga y, sin embargo éstos son ejemplos de que existe una interacción entre materia y energía para producir un cambio.
Las respuestas a estas preguntas las conocerás más adelante, pero es necesario aclarar que un cambio puede manifestarse en diferentes formas, es decir, existen distintos tipos de cambios sobre la materia, a saber: FÍSICOS, QUÍMICOS Y NUCLEARES.