1.1.3 PACTO DE SOLIDARIDAD ECONÓMICA
Entre 1986 y 1987 se dio a conocer el Pacto de Solidaridad Económica (PSE), que pretendió corregir los desórdenes derivados del crack, la devaluación y la hiperinflación (inflación no controlada). Sus estrategias centrales fueron:
- Estabilidad continua de la economía
- Ampliación de la disponibilidad de recursos para la inversión.
- Modernización económica.
El PSE atacó la inflación en dos frentes: con una corrección adicional de las cuentas del gobierno y armonizando los aumentos de los precios y salarios para abatir la inercia inflacionaria. Al mismo tiempo tuvo dos fases: una etapa de corrección con costos inflacionarios inevitables y un periodo de desinflación concertada y sostenida.
En la primera etapa se requirió de una corrección drástica y efectiva en las cuentas públicas, aumentando los ingresos y reduciendo los gastos. El salario se ajustó en 38% acumulado, desde el 15 de diciembre de 1987 hasta el 1 de enero de 1988, para permanecer constante hasta el 1 de marzo del mismo año.
El tipo de cambio controlado, después del ajuste del 22% del 14 de diciembre de 1987, permaneció lo más estable posible hasta el 1 de marzo de 1988. Respecto a las tasas de interés bancarias aseguraron un rendimiento atractivo al ahorrador en moneda nacional y la disminución de los impuestos a las importaciones permitió que la competencia externa regulara la evolución de los precios internos.
A partir del 1 de marzo de 1988, los salarios mínimos y contractuales aumentaron cada mes. Este ajuste de los salarios se hizo con base en los aumentos esperados del índice de precios de la canasta básica, que incluye los principales productos y servicios del sector público. El poder de compra de los salarios no se deterioró y los precios del sector público no se rezagaron, por consiguiente, no hubo ajustes bruscos ni presiones inflacionarias.
La estrategia del PSE fue castigar en mayor grado a los salarios, a fin de reducir la demanda de bienes y servicios y con ello detener los precios.
Esto se evidenció con las medidas aplicadas después de la publicación del PSE, en diciembre de 1987:
- Aumentaron 15% los salarios.
- Aumentaron 80% en promedio las tarifas de luz, gasolina, teléfono y otros servicios.
- Se detuvo el ritmo de deslizamiento5 del peso frente al dólar.
5 Política monetaria que expone al peso a “minidevaluaciones” de acuerdo con el comportamiento de la inflación.
Estas medidas produjeron en diciembre de 1987 una inflación superior al 15% y en enero de 1988 del 15.8%, afectando directamente al poder de compra de los trabajadores, mientras casi todos los bienes y servicios se incrementaron en alrededor de 100%, los salarios sólo lo hicieron en 15% y, a partir del 1 de marzo de 1988, un raquítico 3% por ciento.
A principios de marzo se presentó lo que podría ser la nueva fase del ajuste fondista, el cual era tan neoliberal6 como los anteriores, salvo algunas variantes:
- Aumento del 3% a los salarios, lo que equivale al congelamiento salarial.
- Congelamiento parcial de precios sujetos a control, durante todo marzo de 1988, aunque los precios ya habían subido desde diciembre y enero lo suficiente para estancarse.
- Tarifas y servicios públicos sin aumento.
- Baja en las tasas de interés bancarias, ya que de un nivel de 149% que rendía un pagaré a un mes en los bancos, se redujo a 76%, lo mismo ocurrió con instrumentos como Cetes y Pretrobonos, entre otros.
Con base en estas medidas neoliberales a manera de plan de choque se logró bajar la inflación bruscamente, de 15.8% en enero de 1988 a 8.3% en febrero y 5.5% en marzo del mismo año, mediante el congelamiento de los precios y salarios (aunque fue el salario mínimo lo que se congeló).
6 Doctrina económica que pretende renovar el liberalismo del Estado mediante la intervención limitada en lo jurídico y en lo económico.
1. ¿Qué sucedería si se congelaran los precios de los productos básicos y los servicios públicos, igual que se han congelado los salarios? ¿Qué pasaría en nuestra economía, estaríamos mejor o peor que antes respecto de otros países? Investiga el plan de choque puesto en práctica en Argentina y Brasil.